08 julio 2010

despilfarro mental 1.0

Ella era una chica de corriente escurridiza. De mente aleatoria, que no aleatoriamente demente. Casi nunca sabía que era lo que quería y cuando oía los planes de futuro de sus amigxs solía dibujar una sonrisa empática, sincera pero distraída. Le resultaba cómico ver a tantxs preocupados por el futuro y tan olvidadizos del presente. Aunque siempre prefería que le hablasen de saltos de barranco que remordimientos crónicos en el barro, ensuciarse no le molestaba demasiado, siempre que fuese el medio y no la finalidad. Intentaba escribir todas las cosas que se le ocurrían en su pequeño cuaderno y sonreír siempre que encontraba un imperdible tirado por el suelo; era curioso que algo llamado imperdible siempre andase por el suelo, en cualquier rincón. Le encantaba conocer gente unos días y otros se declaraba fan incondicional de las ideas de Emile Cioran sobre la exasperación que le provocaba el resto de la humanidad. Intentaba comer no más de tres huevos por semana. Desde pequeña había querido trabajar como desenterradora de cosas raras y viejas, los imperdibles del pasado. Eso le hubiese permitido inventar mil y una noches de historias sobre curiosos personajes y no conocer a tantxs gilipollas en plano real.

continuará.

1 comentario:

  1. ole parece una historia muy interesente, espero k no demores muxo en continuarla....

    ya k no hay manera de acabar de conocerte en persona...

    ole wapi esta molt xulu tot la "organizacón" ma encantat.

    a cuidarse mul

    Rai

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