02 junio 2010

Hay, que no ¡ay!


Sonidos que parecen viejos y cansados.
Días que se hacen enemigos.
Sonrisas con las que podría correrme.
Baños refrescantes de ceniza.
Recuerdos eléctricos.


Y casi me vuelvo a pillar los dedos al cerrar la puerta.

4 comentarios:

  1. Cononozco a alguien que se expresa de la misma manera, directa e incisiva...
    http://elalmadisponible.blogspot.com/
    creo que te va a gustar...gracias por un blog tan agradable...un saludo

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  2. gracias Marta por hacerme descubrir ambos blogs, un placer ;)

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  3. jaja ojo con las puertas!! Pueden ser muy malvadas y las de cristal ni te cuento, algún chichón que otro han causado...

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